El asedio que el gobierno de Donald Trump ejerza contra quienes considera población nociva, como delincuentes o narcotraficantes, abona a la ola de deportaciones que se anticipa.
Por: Claudia Lugo / Foto: Especial.
Ciudad de México, martes 21 enero 2025.- Las promesas de campaña del mandatario Donald Trump, ponen en la mesa, uno de los temas más delicados, dentro de las deportaciones de connacionales a México, no solo porque las cifras de indocumentados son millonarias, sino además, porque de acuerdo con las políticas migratorias, se pretende aplicar la “Ley de enemigos extranjeros”, para expulsar de Estados Unidos, a miembros de cárteles, pandillas, traficantes y personas de los penales.
En el último censo se habla de al menos 5.8 millones de personas que serían expulsadas de Estados Unidos, y que la mayoría de ellos, llegará a México, muchos de ellos, refugiados del exilio. Al respecto de este tema, el experto en inclusión y derechos humanos Gerardo Sánchez Guadarrama explicó:
“Quieren es hacer una limpieza, pero aquí se remarca el racismo; el racismo convierte a las personas que no son blancas en criminales, sin entender que muchas veces, ese sector de la población, que por la falta de oportunidades, por la falta de un ´piso parejo´, sistemático, generalmente la balanza se va de ese lado, pero eso no quiere decir, que las personas blancas no cometan delitos”, por lo cual refiere, que de fondo, existe una falta de oportunidades laborales, para todas las personas, sin importar su color.
Ante ese escenario, será importante, recalcó el experto, en seguir analizando el fenómeno de la migración, que alude a diversos tiempos y tipos de población, y para lo que el gobierno mexicano, deberá contar con estrategias para atender la situación cuando esta ley, sea aplicada por el gobierno de Estados Unidos.
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